La forma y modelado de este cañón se debe a la acción erosiva del agua que en el transcurso del tiempo ha ido configurando este impresionante paisaje. Poco a poco el agua de lluvia al penetrar en el suelo reacciona con el carbonato haciéndose soluble y provocando este entorno agrietado e irregular. Es esta disolución del carbonato cálcico causante de un entramado de redes subterráneas en forma de galerías la cual eleva el valor medioambiental de este paraje, pues es tan increíble lo que fuera la vista nos regala como lo que dentro de la roca nos esconde este cañón. El entorno kárstico ha creado numerosas simas, torcas y cuevas así como sumideros en el cauce del río.
El acuífero kárstico del cañón esta formado por calizas del cretácico que se apoyan sobre una base impermeable de margas. Este acuífero es muy vulnerable a la contaminación ya que su parte no saturada no depura de manera idónea el agua que le llega, es por esta razón que los pueblos que vierten al río Lobos tienen que tener especial cuidado a la hora de depurar sus aguas.
Los ríos principales que abastecen al río Lobos son el Navaleno o Arganza, el arroyo de Valderrueda y el río Chico todos ellos perdedores que cuentan con sumideros en sus cauces. También una gran aportación es la del acuífero ya citado que aflora también por manantiales. Puede desaparecer en ciertas épocas del año parte de su caudal por filtraciones pero aparecen en la parte más baja del río, más concretamente en el nacimiento del río Ucero o también llamado manantial de la Galiana.
Este entorno geológico en suma con su fauna y flora hacen del Cañón del Río Lobos un lugar de visita obligada para los que disfruten de la naturaleza y la historia.
Qué interesante este post, seguro que ahora es una buena época para conocer este paraje.
ResponderEliminarAdemás das mucha información geólogica!
un saludo!
Me alegro que te haya gustado Arancha.Si tienes ocasión no dudes en visitarlo te va a encantar este lugar.
ResponderEliminarUn saludo